Los ingredientes son: aceite de oliva virgen extra, aloe vera, infusión de té verde, aceite de coco, aceite de palma, aceite de germen de trigo, aceite esencial de hierbabuena, hojas de té verde y sosa caústica.
El té verde es una planta que se usa desde tiempo
inmemorial en los países asiáticos por sus grandes propiedades antioxidantes. Ayuda a prevenir el
envejecimiento, tiene efectos purificantes, calmantes, relajantes, hidratantes
y suavizantes. El jabón de té verde ayuda a prevenir la sequedad de la
piel y promueve su elasticidad. Es un antiséptico natural.
El Aloe Vera es, entre miles de cosas más, antiséptico, bactericida,
anti-inflamatorio y regenerador de la piel. Previene las infecciones,
facilita la regeneración de las células dañadas y reduce la inflamación y
el dolor.
El aceite de germen de trigo contiene ácidos grasos esenciales para nuestra piel, es rico en
vitamina E y tiene grandes propiedades antioxidantes, antiestrías,
regeneradoras e hidratantes.
Así que aquí os dejo un jabón anti-envejecimiento, antiestrías, calmante, purificante, regenerador de las células de la piel, rico en vitamina E e hidratante.